Hipótesis que le dieron orígen

El proyecto se originó en base a las siguientes hipótesis:

a) Que existe en América Latina una agenda de temas comunes vinculada con la problemática de la región y una población de lectores interesada en ese tipo de información, que debe conformarse con periódicos y revistas internacionales porque no encuentra una publicación de calidad, que hable desde una perspectiva latinoamericana, con voz y mirada propia, y que muestre al mundo lo que sucede en el continente, desde adentro hacia fuera, y no al revés, como sucede con las publicaciones extranjeras, que miran y analizan la problemática regional sólo desde afuera.

b) Que el proceso de concentración de medios de comunicación a partir de los años 90 ha tenido un impacto devastador en América Latina, muy superior al de los países desarrollados, donde, en cierta medida, el Estado actúa de contrapeso para evitar situaciones monopólicas u oligopólicas en el manejo de la información. Como consecuencia de ello, la información en la región es manejada por grupos económicos que censuran los contenidos periodísticos, que ocultan la verdad y desinforman para responder a sus intereses. De esta manera, reducen la agenda informativa circunscribiéndola a aquellos temas que favorecen o no lesionan sus vastos negocios, impidiendo el normal desenvolvimiento de la democracia. Basta con revisar los trabajos acerca de la concentración de medios del Instituto de Prensa y Sociedad, con sede en Lima, para darse cuenta de la dimensión del problema.

c) Que este achicamiento y parcialización informativa, sumado a la obligación de estar alineados con la agenda de las empresas periodísticas, ha llevado a toda una generación de brillantes periodistas y fotoperiodistas latinoamericanos interesados en preservar su honestidad intelectual, a abandonar total o parcialmente el periodismo para refugiarse en la literatura o en publicaciones alternativas, debido a que no cuentan con un medio que les permita desplegar y desarrollar sus talentos.

d) Que ante la actual situación de los medios de comunicación, son muchos los ejemplos en el mundo que dan cuenta de que el periodismo independiente está siendo financiado, en gran parte, gracias al apoyo de distintas ONGs, lo que les permite mantener su independencia, sus estándares éticos y profesionales, y condiciones de trabajo dignas para su gente.